Zona Ciega

La obra "Zona ciega" de Lina Meruane es una meditación profunda que entrelaza crítica, biografía y crónica, ofreciendo una exploración audaz de múltiples relatos que giran en torno al concepto de la visión y su significado en la esfera social, así como su diversidad de representaciones en la literatura. El libro comienza con el ensayo titulado “Matar el ojo”, que se centra en el estallido social chileno, analizando los mensajes tanto explícitos como implícitos en la estrategia utilizada por las fuerzas policiales para cegar a la población. Este análisis no solo se limita a un evento específico, sino que abre un espacio de reflexión más amplio sobre la visibilidad y el control en el contexto social.

En el segundo texto, “Ojos prestados”, la autora regresa a un episodio personal significativo: su ceguera temporal sufrida en 2001. A partir de esta experiencia, Meruane realiza un recorrido literario por cómo la pérdida de la visión ha sido abordada en diversas obras de autores clásicos y contemporáneos, desde Homero hasta John Milton, pasando por Joyce, Aldous Huxley, Borges y João Cabral. Este ensayo no solo ofrece una mirada a la literatura, sino que también revela las complejidades de la relación que los escritores han tenido con la condición visual y su representación.

El trabajo culmina en “Las casi ciegas”, donde la autora explora las "borrosas biografías" de tres escritoras clave del siglo XX: Gabriela Mistral, Marta Brunet y Josefina Vicens. A partir de una amplia investigación de cartas y entrevistas, Meruane despliega cómo estas autoras enfrentaron la ceguera sin que esta condición se reflejara abiertamente en su producción literaria. Así, el libro se convierte en un homenaje a la resistencia y la creatividad de estas mujeres, señalando la complejidad del acto de escribir en medio de las limitaciones físicas.

A lo largo de "Zona ciega", Lina Meruane no solo repiensa el ensayo mediante su fragmentación, sino que también investiga los "espacios ciegos" que existen en la escritura y en la vida misma. Con una prosa incisiva y lucida, la autora examina las diferentes dimensiones de la visión y la ceguera, cuestionando lo que realmente implica tener la capacidad de ver, el impacto de su ausencia, y su relación con el habla y la cultura. Esta obra ofrece una rica reflexión sobre las limitaciones y posibilidades que surgen de nuestra percepción del mundo, invitando al lector a revaluar su propia mirada sobre la realidad.